¿Existe relación entre el café y productividad laboral?

Es lunes, llegas a la oficina o espacio de coworking, saludas a tus compañeros... ¿Qué sigue? ¿Saltar a tu escritorio y empezar con el día? ¡Claro que no! Todos sabemos que el día laboral realmente empieza a partir de la primera taza de café. Más de la mitad de la fuerza laboral consume opta por esta bebida todos los días es parte de nuestras vidas, además, como trabajadores y empresarios parte de nuestra cultura. Esto es por su capacidad para mantenernos despiertos y atentos en trabajo, además de endulzar nuestra boca al inicio del día. ¿Pero realmente existe una conexión en nuestro trabajo y la bebida mañanera por excelencia?

Muchos estudios han demostrado que de hecho existen muchísimas razones más allá de la superstición, el consumo de cafeína puede provocar efectos relacionados con la estimulación del sistema nervioso, lo que deriva en una sensación de mayor energía y motivación. Además de tener un efecto sobre el sistema nervioso, el café bloquea las sensaciones generadas por la adenosina, una sustancia que provoca la somnolencia.

Adicional, también tiene un efecto positivo el hecho de que la gente se levante de su lugar y se tome unos minutos para irse a preparar una taza o para ir a tomar un café porque hace que los trabajadores se desconecten por algunos momentos del estrés de la carga cotidiana de trabajo, se relaja y puede mejorar su rendimiento. Sin embargo, pese a que el café tiene buenos beneficios en las funciones cognitivas, no es la solución para mejorar la productividad, sino sólo un factor más. Hay muchas condiciones de importancia a la hora de trabajar un buen ambiente laboral, estar en el lugar adecuado que se acomode a tus necesidades, que exista una sana relación entre el equipo de trabajo, la motivación y el deseo de superarse cada día, eso acompañada de una buena taza de café es la fórmula secreta para la productividad.

¡Levántate, calienta el agua, pon la cantidad correcta de azúcar, sírvete y que nada te detenga