¿Calidad o cantidad? ¿Cómo debo organizar mi día laboral?

No hay duda alguna, estamos en la era de la especialización, cada vez se espera que seamos mejores en nuestro trabajo sin prolongar nuestro ritmo habitual. ¿Cómo se hace eso? ¿Puedo mejorar la calidad de mi trabajo sin bajar mi nivel de productividad?

¡Claro que es posible! Lee este artículo informativo y entérate como ser el más productivo en tu oficina o coworking space e incrementar la calidad de tu trabajo.

Empecemos definiendo la calidad y la productividad; La calidad es un estándar que se usa con el fin de evaluar el valor de algo, comúnmente en comparación de una actividad o articulo similar. Por ejemplo, cuándo te encuentras en búsqueda de algún bien de tu interés no solo te fijaras en los precios ¿Cierto? Un artículo puede ser barato, pero de mala calidad afectando su uso o durabilidad. El trabajo es similar, quizá se logre producir a gran demanda destinando el mínimo esfuerzo o concentración sin embargo es posible que no sea la mejor versión que pudiste crear. ¿Y la productividad? La productividad es un indicador que busca contabilizar la cantidad de productos y servicios que pueden ser producidos por cada recurso utilizado en su elaboración. Entonces mientras más produzcamos se pueden lograr mayores ganancias.

Ya con esto entendido corresponde el entender cómo aumentar nuestra productividad sin descuidar la calidad de nuestro trabajo.

  • Analiza tus procesos, siempre hay algo que puede mejorar.

  • Realiza un FODA: Una de las mejores herramientas al optimizar es el análisis FODA así podrás identificar tus áreas de oportunidad y tus aptitudes para superar esas deficiencias.

  • Aprende de tus compañeros de trabajo, observa el flujo de trabajo de tus compañeros de oficina o coworking space, si crees oportuno directamente pide consejos, cada persona tiene algo que enseñarnos.

  • Mide: Cronometra tus actividades, ve la forma de graficar tu esfuerzo y el trabajo, conoce en totalidad tu proceso.

  • Optimiza: Al identificar posibles áreas de oportunidad experimenta con métodos diversos que se adapten a tu forma de trabajar.

  • La actitud y meta es clave: Establece una meta contigo mismo, algo medible y posible, avanza en el proceso, ve como mejoras y no te detengas hasta lograrlo.

  • Aprovecha las amenidades que hay en tu oficina: Haz uso de pizarrones para organizar tu día o sácale provecho a la proximidad que tienes a tiendas o restaurantes de la CDMX para ahorrar tiempo a la hora de comer.

  • Nunca olvidar: La practica hace al maestro, mientras más practiques mejor te volverás haciendo tu trabajo y más rápido tendrás resultados.